Tres años de la "no operación", mi peor pesadilla que transformé en mi mayor bendición

En la parrilla de Qatar

Nuestra última parrilla de World Supersport <3 

Buenas,

Por el título de la entrada ya debéis imaginar que esta es una entrada suculenta, llena de reflexiones, emociones y gratitud.

Pues sí, hoy se cumplen tres años de aquella “no operación”, de aquel  contundente “adiós” que me dijo nuestra medicina. Supongo que es importante la manera en que nos tomamos las cosas, pues está claro que si hubiera aceptado ese adiós ya no estaría aquí.

El día antes de la operación preparando algunos de mis amuletos. El leoncito de Aprilia me lo regaló Marco Simoncelli (RIP) <3

Lo conservo todavía en mi casa tal y como lo veis en esta foto <3  Algún día lo abriré para hacer fotos a las cosas que tengo dentro! Mientras estaba en el hospital el día antes de la no operación me las iba pasando por la barriga xd

El 1 de diciembre del 2014

PUTA VIA! Odio cuando me las ponen aquí grrr....


Tras el estado de shock en que te deja un cirujano cuando te dice, a los 27 años, que te quedan entre 4 y como mucho mucho 14 meses de vida ¡siempre y cuando la quimio funcione! (me especificó también que cuando dejara de funcionar, unos cuatro meses como mucho) y que además esto te lo diga dos días después de que no pudieran realizarte una operación, aquella operación en la que yo había depositado todas mis esperanzas, no sólo yo, toda mi familia, mis amigos e imagino que todos los médicos del Hospital de Terrassa que me han tratado y me tratan (os recuerdo que la operación HIPEC no la hacen en todos los hospitales y me derivaron a uno que en principio es el mejor de España).  Creo que es fácil imaginaros como me sentía al escuchar aquello, pero todo lo que os imagináis… ¡Multiplicarlo por 10 y quizás así os acercáis! No me echó un jarro de agua fría no…¡¡me intentó ahogar con 100!!


Mi cara cuando llegué a la habitación después de la no operación





No es que nade muy bien así que no intenté salir de allí donde me había sumergido ese cirujano nadando, si no con creatividad e imaginación. En esto sí que soy buena. Y sobre todo, con ilusión de superar retos, más de los que ya había superado. Cuando me lo dijo estaba con Alex y una enfermera y fui incapaz de llorar, os lo juro. Estaba cabreada, no entendía como una persona podía ser tan cruel. La enfermera me vino a abrazar y me dijo: “No sé cómo has aguantado tan bien”. En realidad no lo sabía ni yo, pero esta no es la primera vez que me pasa. Pensamos en cómo podemos reaccionar ante situaciones difíciles pero cuando realmente te encuentras en ellas sueles actuar de manera distinta a cómo te lo habías imaginado.

Con mi creatividad, traduje ese “adiós” a un “hasta luego” y me tomé mi nuevo camino como un reto para demostrar a la medicina que no tienen siempre la razón, aunque nos hayan acostumbrado a esto. Se equivocan, y no son los únicos que nos pueden curar. Ese “adiós” fue un “espabílate”. Estaba muy motivada, dispuesta a darlo todo para la lucha más dura, para la más importante, para la más emocionante de mi vida. La había empezado en 2012 pero ahora debía encontrar todas mis fuerzas dentro de mí.



Lo que fue más difícil fue explicárselo a la gente tratándola de animar al mismo tiempo, porque ellos quizás no sabían hasta dónde puedo llegar. Sinceramente, ni yo me lo podía imaginar. Me daba miedo decírselo a mis padres, aunque imagino que en el momento en que los llamaron para decir que no me pudieron operar ya se olían algo… Como no quería caras de pena, decidí decir a la gente que me preguntaba que la operación había ido bien, así me ahorraba todo el rollo y las consolaciones insuficientes.  Poca gente sabía lo de los meses…mejor así. La compasión es algo que odio.
Ya sabéis que en julio del 2014 empecé una dieta vegetariana, sin azúcares, sin harinas refinadas…Me costó dejar el queso pero gracias al libro del Estudio de China lo conseguí en mayo del 2015. También dejé el pescado y los huevos. Pero eso ya lo he explicado en otras entradas y no voy a enrollarme con el tema.



Tenía un gran obstáculo delante, pero sabía que dentro de mí tendría todas las armas y todas las capacidades para superarlo. Porque creo que si la vida nos pone trabas sabe que seremos capaces de superarlas, si queremos realmente hacerlo, porque moveremos todo lo necesario, realizaremos todo lo que esté en nuestras manos por mucho que nos cueste y poco que otros nos entiendan para alcanzar nuestra meta. Tenemos que aprender a escucharnos, a buscar las cosas dentro de nosotros y no fuera. La felicidad la encontraremos en nosotros mismos, no en los objetos que nos queramos comprar, porque esa felicidad es pasajera y rápido buscaremos otras cosas que nos hagan creer que somos felices.




A pesar de contar con una buena base, empecé a buscar más información sobre tratamientos integrativos a todos los niveles. Además, me llegaba información por parte de los familiares y los amigos. Mucha. Demasiada. Así que la seleccionaba. Pensaba qué me iría bien y que no, para que seria beneficioso, como podría adaptarlo a mi vida para que no causara estrés... Hay tantas curas, hay tantos alimentos, tantas cosas… que es imposible hacerlo todo. Pero lo más importante es ser activo y no perder nunca las esperanzas.  Así fui mirando en mi interior, escuchándome, basándome en mi intuición que creo que es mejor que todo lo que nos puedan enseñar en las escuelas y universidades, pensaba qué sería bueno, qué sería necesario, qué valía la pena probar primero, o dejarlo como plan b.

Las corazonadas, los presentimientos, los antojos…tenemos que percibirlos, nuestro cuerpo nos da la respuesta para todo si lo sabemos atender. Nuestro organismo nos avisa, si aprendemos a escucharlo, nos guía si disponemos de paciencia para esperar. Aprendí a valorar las percepciones, las perspicacias, las clarividencias, deposité mi confianza en la magia de la naturaleza y en la magia de mi cuerpo. Y me armé de paciencia, mucha paciencia. Me volví muy perseverante, sin nunca bajar la guardia. Investigué sin buscar los ¿por qué?  de lo que hacía ya que solo me importaba el para qué.  Tenía un objetivo claro y con todas estas cualidades junto al valor, la confianza y mucha fe me lancé a ciegas ante mi nueva aventura, contando con el apoyo incondicional de mi novio, mi familia, mis amigos.



Y así, han ido pasando los meses, y los días. Los cuatro meses fueron justo para el día de mi cumpleaños. Es una sensación muy extraña, celebrar el 28 cumpleaños sabiendo que quizás fuera el último. Celebrar el fin de año viendo a toda la familia sin saber si yo podría repetir. Llegar a la fecha de la boda, tras un descanso de quimioterapia merecido tras un año seguido de ciclos y estrés, esa boda que el cirujano nos había aconsejado de adelantar. Y seguir cumpliendo años, y aniversarios de boda (ya llevamos dos!) y lo más importante, siempre me he sentido bien (no me habían pintado muy bien las cosas al explicarme los problemas que tendría a medida de que pasara el tiempo). Me sentía cada día mejor, cada día más motivada, cada día con más energía, con más ganas de aprender cualquier cosa, de leer, de cocinar, de ver cómo crecen mis hijos perros, de ver como la vida que en principio no debería haber continuado, continua. Y de aprender a valorar estos días extras haciendo las cosas que me gustan. Y cada día que pasa le estoy agradecida, a la vida, por darme la oportunidad, otra oportunidad, de vivir, de crecer, de aprender y de valorar las cosas simples del día a día. Cada mañana, cada noche, se lo agradezco. Y agradezco las cosas buenas y las malas que me hayan pasado.

Porque las cosas malas son necesarias para crecer. Mirad, la no operación del diciembre del 2014 tenía que ser mi peor pesadilla, era la peor de las hipótesis que podían pasar, y pasó. Y en ese momento me dije a mi misma “Pues Núria si el tumor estaba en un lugar dónde no lo podían operar, por algo será, quizás ese era un camino demasiado fácil y tengo que buscar uno donde sea la protagonista, mucho más gratificante, tentador, excitante”. Y así transformé mi peor pesadilla en mi mayor bendición.

Gracias cuerpo, gracias mente, gracias alma por estar siempre unidos para hacerme feliz y para hacerme redescubrir y aprender el significado de esta vida y gracias por ofrecerme siempre motivos para continuar adelante, a veces a ciegas pero siempre bien acompañada. Gracias.  

Colaborar, ayudar a la gente aportando mi experiencia, eso también me rinde feliz, saber que puedo ayudar a gente que esté tan hundida como yo lo he estado. Y para eso está este blog del que tan orgullosa estoy. Cuando lo empecé nunca imaginé que sería así. Gracias, lectores, por hacerme feliz, por colaborar en mi lucha. 

Gracias por todo a Odile Fernández, Josep Pàmies y Ramón Menal que sin conocerme me han ayudado en todo y sin querer nada a cambio. Os quiero! Gracias también a mi querido oncólogo Jordi Alfaro y a todo el personal del Hospital de Terrassa que me ha ayudado tanto durante estos años. Gracias eternas a Francesc Aguilar, allí dónde estés.

Alex <3

Mi padre y el neceser de amuletos

Mi madre

La Balda

Mi padre y mi tiet

Con Django


Alda

Mi primo Nojo





Con Alex, Django y Bongo

Tradicional visita de Bongo a los hospitales cuando estoy ingresada <3 mi bebé!

3 días después de la no-operación conseguí que por fin me trajeran comida vegana! yuhuu

24h después de la no operación

Regalitos <3

LA ADOPCIÓN DE KIRO

Tras darme aquella noticia, convencí a Alex y a mis padres para adoptar un dálmata. Quería que fuera marrón así que ellos se pensaban que tardaría en encontrar uno marrón en adopción (suelen ser raros). Fue cuestión de minutos encontrarlo (soy muy hábil). Él es Kiro, y el 5 de diciembre hablé con Inés, quién entonces lo tenía en acogida, y le parecí apta como nueva mami de Kirikín. Llegó el 15 de diciembre a nuestras vidas. A continuación tenéis la primera foto que me mandó de Kiro y luego el primer encuentro con su hermano Bongo.

Siempre he pensado que dando vida, te dan vida. Así que adoptamos a un perrito que lo había pasado muy mal, como yo, para ayudarle y que él nos ayudara. Bongo lo adoptamos con el primer cáncer, llegó 5 días antes de mi primera operación.

La primera foto que recibí de Kiro

Bongo y Kiro el primer día jiji

Bongo, Kiro y Alex hace unos días.
Xavi Cardelús también se puso pegatinas de mi blog en su moto para la última carrera de World Supersport 2017 :) gracias!




En Valencia para la última prueba del CEV, hace dos o tres semanas

Después de la carrera
El pasado viernes 17 de noviembre en el Hospital de Terrassa (mi hospital) hicieron una jornada sobre terapias integrativas, estoy muy orgullosa de que en mi hospital se realicen estas terapias integrativas a los pacientes oncológicos. Muchas gracias a todos los que lo hacen posible :)

Después, fuimos al Satya Yoga (donde practico yoga cada semana) a un concierto de Xavi Sorolla, Banys de so. Increíble. Lástima que haya tan pocos al año :(

Con Silviki en Valencia. Cosas de la vida...mirad que número hay detrás nuestro jiji



Nai <3 

Comentarios

  1. Pues me alegro mucho Nuria por tu recuperación , he leído tu historia y la verdad que te admiro esa fortaleza , yo no es por ponerme moños pero sin llegar a una situación extrema de esa índole si veo es valor de la vida , con mis errores como humana que soy .
    Lo que me da mucha pena y rabia a la vez y me afecta sicológicamente hablando es que las personas no se dan cuenta de ese valor que nos brinda la vida asta que no llegan a un punto así .
    Hacen daño gratuitamente y van por la vida avasallando pero bueno yo me digo que es una prueba más de la vida el saber vivir con personas "malas" pero bueno , tú dirás y está mahara que me está contando jajaja , pero nada es contarte algo de cómo soy y que me alegro mucho mucho de tu recuperación sin más recibe un bezazo desde Málaga ���� han y que eres muy guapa y tus perritos me encantan ������ lastima que no te pueda enseñar una foto de mi perrita jeje pero es cierto que nos da la vida estos animalitos jajaja

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Mándamela a nairuna@gmail.com y la podré ver jejejej. Tienes toda la razón del mundo con lo que dices ;) me ha encantado. La gente debería aprender los valores pero imagino que tenemos que tener un poco de todo en esta vida y por eso existen “malas” personas, aunque seguro que ellos se ven como buenas. Un beso y espero la foto de tu perra! Por cierto Kiro viene de Sevilla!!!

      Eliminar
  2. Hola guapa! He leído esta entrada y me ha parecido una historia impresionante. Te escribo por dos motivos. Primero para decirte que eres muy valiente y luchadora, y tu historia es digna de conocerse para ayudar a dar ánimos y fuerza a toda la gente que está batallando contra esta dura enfermedad. Y segundo, quería decirte que yo tengo un familiar muy cercano que está exactamente en la misma situación que tú, con 17 años le diagnosticaron un cáncer que por el lugar donde se encontraba resultó ser inoperable, de eso han pasado ya 6 años, y desde hace tiempo los tumores están parados y dejaron de crecer. Ella sólo recibe radioterapia y hace una vida sana y vegetariana con ayuda de los libros de la doctora Odile, se lo ha tomado muy en serio y es muy fuerte. Leyendo tu historia la he visto reflejada a ella, aún sin contar con la medicina se puede porque lo más importante es nuestro interior, cada célula se alimenta de lo que les damos, y nuestro estado de ánimo influye mucho. La gente como vosotros sois verdaderos luchadores, grandes historias de superación ganando la batalla al cáncer.
    Que sigas recuperándote y luchando con la misma mentalidad. Un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias por leerme y gracias por contarme este caso, debería escribirlo por algún sitio para dar esperanza a los luchadores, estos casos motivan!

      Eliminar
  3. He quedado impresionada de la fuerza y optimismo que has sacado en un momento tu vida poco halagüeña, mi admiración hacia tí y todas esas personas que luchan ante la adversidad,Son un buen ejemplo a seguir. Gracias por compartir tus vivencias, un abrazo y adelante siempre adelante.......

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. muchas gracias por tus palabras Dina, gracias por tu comentario.

      Un abrazo <3

      Eliminar
  4. Gracias a ti por leerme Dina y por este maravilloso comentario! Un beso ;)

    ResponderEliminar
  5. Gracias por compartir! Yo tampoco me conformo con mi pronostico. Voy a hacer 5 años en trata y comparto todo lo que transmites. Me alegra haberte leido hoy pues me viene bien tu empujoncito. Gracias sol

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. hola! siento no poderme dirigir a ti por tu nombre pero felicidades por esos 5 años :)

      muchas gracias por escribirme!

      Eliminar
  6. Muy buenas!!! Me acabas de hacer muy feliz simplemente leyendo un poquito de ti. Soy José, este año hace 10 años que terminé una experiencia similar(linfoma Hodgkin) es verdad que cuando se pasan situaciones de tal calibre uno aprende mucho en la vida, son cosas que uno no decide, pero nos vienen y seguiremos adelante como el sol cada mañana, llenos de luz y esperanzas. Te deseo lo mejor y mandarte un besazo a ti y todos cuanto están a tu lado.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Jose! En unos años llegaré yo también a los 10 :) muchas gracias por escribirme y resumir tu historia, un fuerte abrazo para ti y mucha fuerza. Tus palabras son geniales.

      Nai

      Eliminar
  7. Hola Núria enhorabuena,
    sigo tus pasos, yo estoy igual que tú, con metástasis de un cáncer de mama y siguiéndote, mucha fuerza, de momento sigo sin evidencia de enfermedad contra todo pronóstico, desde hace 2 anyos, vivo el Alemania y aquí también hay muchas alternativas naturales.

    Un abrazo

    Meritxell

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Meritxell si no me equivoco me escribiste hace un tiempo al correo electrónico "la otra meri" jjejeje bueno pues a ver cuando coincidimos.

      Hace unas semanas fui a una jornada de terapias alternativas en mi hospital (el hospital de terrassa) y había una chica de un hospital de Alemania (Essen) y uno de Italia, y me quedé flipando de lo adelantados que están en ambos países, así que aprovéchate de la suerte de estar en Alemania.

      Un beso Meri!

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Las recetas de Nai: Zumo de pimiento rojo, tomate, zanahoria y limón con un toque de jengibre

10 años y medio desde el primer diagnóstico de cáncer de colon

Ensalada veraniega